No puedes abandonar la capital germana sin antes pasarte por su famosa casa okupa de Berlín, si es que aún sigue en pie, claro, ya que la vez que yo he ido en mayo había manifestaciones en contra de su demolición. Se trata del edificio Tacheles, situado en Oranienburger Strasse. Te llamará la atención por sus coloridos grafitis y sus pequeñas tiendas-talleres que se encuentran en su planta baja. Aquí podremos encontrarnos increíbles cuadros, algunos de ellos bastante críticos en cuanto a la política y el capitalismo; camisetas, fotografías, esculturas, etc. Todas ellas asombrosas. Esta casa abandonada ha sufrido muchos daños durante la Segunda Guerra Mundial y no han sido reparados, por eso parte de ella está en ruinas.
Sin embargo, a pesar de los desperfectos el arte fluye por todo el edificio, y no es de extrañar, ya que artistas de todo el mundo se instalaron en él en 1990, un año después de la caída del muro. El nombre de Tacheles viene del yidish, ya que se encuentra en el antiguo barrio judío de la ciudad, y significa algo así como «honesto, simple, sencillo». La razón por la que fue llamado así tiene que ver con los problemas de censura que había en la época de la RDA en contra del arte, la música, la cultura, etc. Por ello, jóvenes artistas internacionales convirtieron este edificio en ruinas en una auténtica obra de arte de lo más atrayente para los turistas.
¿Por qué quieren demoler el edificio Tacheles, la casa okupa de Berlín?
Este edificio se contruyó en 1907 con la idea de hacer en él el centro comercial más grande de la ciudad. Sin embargo, una mala gestión lo llevó a la ruina y cada vez que se montaba un negocio en él iba a pique. Durante la Segunda Guerra Mundial fue una prisión para soldados franceses. Éste sufrió daños bastante importantes, aunque nunca fue reparado. Tras la guerra fue una sala de exposiciones, la televisión pública alemana emitió desde allí y hasta se trasladaron allí las oficinas del partido Nacional Socialista.
Su primera demolición comenzó en 1980, que se llevó por delante la cúpula y la sala de cine fue cerrada. La segunda parte de la demolición, ya que el edificio aún estaba ocupado, estaba prevista para 1990. Sin embargo, el hecho de que muchos artistas internacionales se trasladaran allí y montasen sus talleres hizo que ésta tuviera que ser pospuesta. Allí se formó un movimiento, el Künstlerinitative Tacheles, que hoy en día sigue luchando por mantenerlo en pie.
Algunos de estos artistas okupas se acabaron trasladando a otras partes de Berlín. De los que quedan se formaron varios grupos. Algunos de ellos a favor de aceptar el dinero que les ofrecen, un millón de euros por abandonar el solar. Otros, en cambio, no quieren vender sus ideales ni lo que es ya una forma de vida para ellos. Dicen que el edificio Tacheles ya no es lo que era, ya que la zona de Oranienburger Strasse se ha llenado de prostitutas, camellos y turistas. Sin embargo, es inevitable no lamentar la posible pérdida uno de los lugares más populares de la capital. https://www.ezgame88.com Y todo por dinero…
Berlín, sin duda, es una capital llena de arte. Ya no sólo por la existencia de este lugar, sino que de todos los restos que quedan de historia, o de edificios abandonados, hacen un lugar completamente distinto y especial. Sino sólo hace falta visitar también la East Side Gallery.
Ver comentarios (3)
Estos lugares me encantan y me pase un par de veces cuando visité la ciudad. En Paris hay otro parecido que también está muy bien... Esperemos que no lo quiten, porque cuando vuelva a Berlin, que volveré, quisiera pasarme por allí.
Un saludo!
ah ¿si? Pues la de París no la conozco... habrá que acercarse a visitarla. Yo también espero que la de Berlín no la cierren, sería una pérdida. Gracias Victor por pasarte ;)
Aixxx.. cuantos recuerdos!!! hay q volver y recorrerse Alemania!!! El articulo esta genial!!